28 noviembre 2006

El más grande se come al más chico o ¿es al revés?

Esta es una guerra de David y Goliat, pero cuidadito Goliat porque te puedes quedar con los crespos hechos! Escrito por Alejandra Noemi


Mientras realizaba mis estudios universitarios por el norte del país, decidí hacer mi tesis acerca de las radios comunitarias y su repercusión en el mundo globalizado. Junto con dos compañeros más, nos interesó la experiencia de la radio comunitaria de Mejillones.

En esa época nos convertimos en parte de la localidad, conversábamos con los vecinos y nos pudimos dar cuenta del poder que pueden alcanzar estos medios de comunicación.

Pasado el tiempo, lo he podido observar en Rancagua y en toda la sexta región, como estas pequeñísimas emisoras son capaces de encontrar a un pariente perdido, socorrer a una vecina en apuros, contactar para la reunión de la próxima semana del centro de madres, o sólo para vender un par de chanchos.

Lamentablemente cada día son menos las emisoras comunales o locales que van quedando en nuestra región, debido a las monstruosas empresas radiales que existen hoy en el país. Aquí el más grande se come al más chico. Y se acabaron los recados entre vecinos, el aviso de la pichanga dominguera o el bingo del club deportivo.

Al observar esto, no pude más que pensar que esto era sólo parte de la globalización mundial y que obviamente nos teniamos que acostumbrar. Pero bueno, hoy al revisar mis mails me pude dar cuenta que los dueños de radios locales no se están quedando quietos ni esperando que se los coman. Fue así como está en curso un Proyecto de Ley que ya fue firmado por la Presidenta de la República y que ingresará esta semana al Congreso, sobre resurgimiento de radios locales y que modifica el proceso de concesión.

Y eso no es todo.

La actual Ley sobre concesiones radiales, establece que cuando hay dos proyectos postulando a la concesión y que son técnicamente similares, se resuelve el empate a través de una licitación en dinero. Lo que esta Ley cambiaría, es que ante un empate por razones técnicas, se privilegiará, primero, a las radios que tengan concesión AM y quieran cambiar a FM. En segundo lugar a las emisoras con clara identidad local y en tercer término a aquellas que no posean más de una concesión radial antes, evitando así que unos pocos tengan muchas concesiones.

Cabe mencionar que este proyecto es una conquista para las radios locales y que su origen fue en Radio Rancagua, que ha promovido una batalla nacional en pro de la sobrevivencia de estas emisoras en Chile.

Ahora ¿quién se come a quién?

http://www.elrancahuaso.cl/admin/render/noticia/6290