27 junio 2008

EEUU: El camino hacia mejores medios de comunicación

Adital - Amy Goodman

Miles de personas se reunieron en Minneapolis para participar de la cuarta Conferencia Nacional sobre la Reforma de los Medios, evento organizado por freepress.net. Los asistentes eran de distintas edades y estilos y se congregaron para abordar una de las crisis centrales de nuestra sociedad: nuestro quebrado sistema de medios de comunicación. Yo era una de las disertantes invitadas.

A pesar del incremento en la oferta que suponen los medios digitales y de la existencia de cientos de canales de televisión, vemos cómo junto con la disminución de la diversidad de propietarios de los medios de comunicación, disminuye la diversidad de las voces que son emitidas en ellos. Los ciudadanos se defienden de esto organizándose, creando alternativas y reclamando que las grandes corporaciones mediáticas rindan cuentas sobre su accionar.

Las corporaciones repelen esta posibilidad. Con la vida y la muerte y la guerra y la paz en juego y dependiendo de un pueblo informado y comprometido, los riesgos nunca han sido tan grandes, los medios nunca han sido tan importantes.

Destacados periodistas de los medios tradicionales con décadas de experiencia se mezclaron con la generación emergente de productores de los nuevos medios. El periodista Bill Moyers, que ganó más de 30 premios Emmy, escribió cuatro best-sellers y actualmente conduce en la PBS el popular programa semanal de noticias "Bill Moyers Journal", inauguró el evento el sábado con una conferencia plenaria, en la que dijo:

"Las corporaciones que dominan los medios de comunicación, en última instancia, responden únicamente ante las juntas directivas, cuya misión no es la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad para toda nuestra república, sino incrementar las ganancias de los ejecutivos y accionistas de las empresas". News Corp., propiedad de Rupert Murdoch, es el arquetipo de los conglomerados mediáticos. El imperio mediático de Murdoch abarca todo el planeta, con 35 emisoras en EE.UU., el supuesto canal de noticias Fox News Channel y muchos otros canales de cable, The Wall Street Journal, el New York Post, HarperCollins, los estudios de cine 20th Century Fox y una gran cantidad de espacios deportivos y de entretenimiento relacionados entre sí.

La crítica abierta de Moyers hacia los medios corporativos ha provocado al principal perro de ataque de Murdoch, Bill O’Reilly. La semana pasada, en su programa de la Fox, O’Reilly dijo de los partidarios de la reforma de los medios: "Esta gente está loca... ¡son verdaderos chiflados!" Josh Silver, Director Ejecutivo de Free Press, respondió: "[O'Reilly] es el portavoz de las corporaciones mediáticas más grandes. Y de tratar de controlar ese poder omnipotente que tienen estas empresas de comunicación social es precisamente de lo que se trata esta conferencia.

Cuando Moyers terminó de firmar ejemplares de su último libro, el productor de "O’Reilly Factor", Porter Berry, acompañado de su equipo de cámara, se abalanzó sobre él. Dan Rather estaba en la conferencia pero logró eludir el acorralamiento de la Fox. Moyers volvió la emboscada de la Fox contra Berry:

Moyers: "Rupert Murdoch dijo que la mejor cosa que sacaríamos de la guerra de Irak sería el petróleo a 20 dólares el barril. Ahora bien, hoy, cuando llegue aquí, me fijé, y estaba a 130 y pico de dólares. ¿Cuándo va a explicar Rupert por qué la guerra no nos ha conseguido un barril de petróleo a 20 dólares?"

Estableciendo el vínculo entre los conglomerados mediáticos y el militarismo, Moyers siguió interrogando a Berry acerca de Murdoch:

Moyers: "¿Trabaja Bill O’Reilly para Rupert Murdoch?"

Berry: "Trabaja para Fox News".

Moyers: "Pero, ¿quién es el dueño de Fox News?"

Berry: "News Corp. ..."

Moyers: "Rupert Murdoch es el que manda".

Los videastas de Indymedia se agolparon alrededor de ellos, y los videos tardaron poco en aparecer en internet. O’Reilly emitió una versión muy editada del intercambio, que no incluía nada de lo mencionado arriba, pero había invitado a su programa a un "experto en lenguaje corporal", en un intento de desprestigiar a Moyers. El hecho de que hubiera productores de Murdoch en la conferencia intentando desacreditar a participantes de gran relevancia demuestra lo necesario que es disponer de medios de difusión honestos, sólidos y que ofrezcan una alternativa al paradigma dominante.

El senador Byron Dorgan también se sumó a la Conferencia. El lunes, él y los senadores John Kerry, Robert Menéndez y Frank Lautenberg presentaron un proyecto de ley que impediría al Pentágono el uso de fondos para realizar propaganda, y pidieron al inspector general del Pentágono y a la Oficina de Responsabilidad Gubernamental del Congreso (GAO, por sus siglas en inglés) que investiguen las acusaciones de que se empleó a generales retirados para impulsar la guerra contra Irak.

Los funcionarios electos no solucionarán solos nuestra crisis mediática. El movimiento de base a favor de la reforma de los medios está creciendo y, en tiempos de despidos masivos en las salas de redacción de periódicos y emisoras, elecciones cruciales, crecientes presupuestos militares y guerras y ocupaciones múltiples, además de las nuevas y accesibles herramientas digitales y las redes de comunicación alternativa cada vez más accesibles para más cantidad de personas, no puede haber mejor momento para sumarse al movimiento.

http://legislaciones.item.org.uy/index?q=node/659

11 junio 2008

Principios regulatorios para radio y TV comunitaria en América Latina

Carlos Rafael Diéguez. B
Rebelión


La Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) cumple veinticinco años (http://www.amarc.org) y en este contexto de recordación América Latina acaba de anunciar 14 principios para un marco regulatorio democrático sobre radio y TV comunitaria que constituye una guía de responsabilidad de difusión de contenidos sin precedentes que no solo sirve para este movimiento; es un ejemplo para otros sectores mediáticos si tenemos en cuenta la desleal competencia donde prima la recolonización de nuestras culturas a través de contenidos foráneos que imponen otros modos de vida a la población del Bravo a la Patagonia.

Los principios están recogidos en un documento denominado "Mejores prácticas sobre marcos regulatorios en radiodifusión comunitaria", fruto de la investigación de especialistas y expertos durante dos años. Los principios que se proponen intentan armonizar y hacer compatibles las regulaciones internacionales de derechos humanos y el respeto a la comunicación y la libertad de expresión. La guía se inserta en el universo mediático al comparar e incluir elementos de otros marcos regulatorios de los cinco continentes y contextualizarlo.

El documento compara los marcos regulatorios sobre radiodifusión de veintinueve países de los cinco continentes para identificar las mejores prácticas en legislación y políticas públicas dirigidas a reconocer y promover la radio y TV comunitaria.

Los catorce principios presentados buscan promover la incidencia de la sociedad civil en la definición de políticas públicas y marcos regulatorios en radiodifusión orientados a lograr el reconocimiento y garantizar del ejercicio de los derechos de libertad de expresión e información a través de los medios comunitarios. Los 14 principios del novedoso documento se encuentran en http://www.gacemail.com.ar/Detalle.asp?NotaID=7634

Un buen reto para tratar de establecer un justo orden. La guía puede convertirse en una demostración de como América tiene diversidad de opciones y potencialidades para unirse. Si los gobiernos apoyan y de verdad hacen caso a estos principios, las comunidades del continente, sus pobladores, comenzarían a descontaminarse y propiciar un entorno mediático capaz de cultivar educación y cultura como formas elementales de ser verdaderamente libres.

Los 14 principios sirven además para que los dueños de los grandes consorcios de prensa piensen como cambiar y perfeccionar algunas estrategias, hasta hoy determinadas por normas del mercado tangible. Hacer radio y televisión es fruto del espíritu, de conciencias y no de dinero. El día que las radios y los canales de televisión comunitarios puedan tributar sin frenos a los grandes medios, entonces la democracia será participativa y no tan representativa, tema abordado por José Ignacio López Vigil en una entrevista publicada en Rebelión (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=64615) donde afirma que “...en la medida en que la gente habla, reclama sus derechos, protesta, opina... se fortalece lo que hoy es más urgente en América Latina, la democracia participativa. De "representantes" estamos ya bastante saturados”.

En los nuevos principios dados a conocer se afirma que la radiodifusión comunitaria debería estar “expresamente reconocida en la ley como una forma diferenciada de medios de comunicación” beneficiada por “procedimientos equitativos y sencillos para la obtención de licencias” de esta forma se permitiría el acceso a publicidad sin obstáculos técnicos para acceder a la radio y la TV.

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=68614&titular=principios-regulatorios-para-radio-y-tv-comunitaria-en-am%E9rica-latina-

Los peligros del Google como único filtro de la realidad

Silvio Mieli

Buscar cualquier cosa en aquel rectángulo mágico del buscador Google. Si no aparece nada quizás “la información que buscamos no exista” ¿Será?


“En el inicio del tercer milenio, enfrentamos una situación única en la historia, que hace que una corporación privada de América determine la manera cómo buscamos informaciones”. Así empieza la primera parte de la “Investigación sobre los peligros y oportunidades presentados por los programas de búsqueda en Internet (Google, en particular)”, desarrollada durante el año pasado por el Instituto de Sistemas de la Información y Computación de la Universidad de Tecnología de Graz, en Austria. El proyecto fue coordinado por el Prof. Hermann Maurer y financiado por el Ministerio austriaco de Transportes, Innovación y Tecnología (el estudio completo puede ser bajado aquí: http://www.iicm.tugraz.at/iicm_papers/dangers_google.pdf )

La investigación cuestiona una actitud natural de los usuarios de la Internet: buscar cualquier cosa en aquel rectángulo mágico del buscador Google. Si no aparece nada quizás “la información que buscamos efectivamente no exista”. ¿Será?

El objetivo del trabajo, cuyos resultados fueron poco divulgados por la mass media corporativa, es demostrar el comportamiento monopolista de la empresa Google, además de denunciar lo que los investigadores llamaron “Síndrome Google de Copiar y Pegar”. Se trata de la emergencia de una generación de “investigadores” que se limitan a hacer una colcha de retazos de informaciones pinchadas en Google, disfrazadas de trabajos escolares o académicos, sin por lo menos citar las fuentes.

La presentación de la investigación austriaca va directo al punto: “para quienquiera que encare la cuestión queda claro que Google acumuló un poder que se acabó constituyendo en una amenaza a la sociedad”, ya que se transformó en la principal interfaz entre la realidad y el investigador en Internet. Google tiene el monopolio de los programas de búsqueda e invade masivamente la privacidad de las personas. Sin enfrentar limitaciones de cualquier naturaleza, Google conoce particularidades de los individuos más que cualquier otra institución, “transformándolo en la mayor agencia de detectives del planeta”. La influencia del Google en la economía es directa, sobre todo en la manera que son exhibidos los anuncios (cuanto más la empresa paga, mayor visibilidad tendrá el anuncio). Además, parte de su facturación, superior a 16 mil millones de dólares en 2007, se debe a su estrategia de publicidad online a través de los enlaces patrocinados.

Jerarquía


Desde el primer programa de búsquedas en Internet, Altavista, lanzado en diciembre de 1995, se vive la sensación de que el dato en bruto se transforma en conocimiento, en información viva. Con la aparición del Google, fundado en 1998 por el dúo Larry Page y Sergey Brin, jóvenes doctorados de la Universidad Stanford, en California, se pasó a otro nivel de programas de búsqueda. Brin definió que las informaciones en la Web deberían ser organizadas en una jerarquía de popularidad. Es decir, cuanto más enlaces conducen a una página específica más la página merece ser “ranqueada” en los resultados del programa de búsqueda. Otros factores, como el tamaño de la página, número de cambios, actualizaciones constantes, títulos y enlaces en el texto habían sido incluidos en la programación (algoritmo) de Google. Lentamente el programa implantó un proceso de jerarquización de las informaciones que pasó a ser aceptado sin objeciones. En marzo de 2007 Google alcanzaba el 53,7% del mercado de los buscadores de la red (según estadísticas de la Nielsen/ NetRatings).
Considerando que muchas de las informaciones que circulan en Internet parten de indicaciones del Google o de la Wikipedia (la gran enciclopedia de contenido “abierto” de la Internet), Stephan Weber, coautor del proyecto de la Universidad de Tecnología de Graz, denuncia una especie de “Googlarización de la realidad”, ya que existen fuertes indicios que Google y la Wikipedia operan a partir de una especie de sociedad. Los investigadores eligieron a la ventura 100 notas en alemán y otros 100 en inglés del índice de A a Z de la Wikipédia y pusieron estas palabras claves en cuatro grandes programas de búsqueda (Google, Yahoo, Altavista y Live Search). Google registró 91% de los resultados de las entradas de la Wikipedia (en alemán). Para las webs en inglés los resultados alcanzaron 76% de registros en Google. “Parece evidente que Google está privilegiando las webs de la Wikipedia en su ranking”, concluyó la investigación, seguida por Yahoo (56% en alemán y 72% en inglés).

Plagio

La segunda sección de la investigación se dedica a la emergencia de una nueva técnica cultural y sus implicaciones socio-culturales: el plagio (un tal síndrome del “Copiar y Pegar”) y sus relaciones con los conceptos contemporáneos de propiedad intelectual. El estudio cita el caso de un ex alumno de psicología de la Universidad Alpen-Adria de Klagenfurt, en Austria, que elaboró su tesis de doctorado con más de cien fragmentos copiados de la Internet. Las primeras páginas de la tesis eran un collage de veinte webs, muchos de los cuales sin el menor rigor científico. Frente al plagio, la universidad pasó a aplicar un software alemán de detección de copias llamado Docol©c (http://www.docoloc.de/ ), cuyos resultados todavía están siendo comprobados.

La propuesta práctica de la investigación es la de reducir la influencia del Google a partir del desarrollo de otros programas de búsqueda especializados en Europa, desvinculando la jerarquía comercial del libre flujo de datos públicos que circulan por Internet.

Así como el estadounidense Gerg Venter, dueño de la empresa Celera, pretende mapear el código genético de todo lo vivo para patentar y vender, Google parece querer codificar todas las informaciones circulantes en el planeta, según criterios que no siempre privilegian el interés público. Más que enfatizar Google como “la empresa del siglo XXI”, la Universidad de Graz presta un gran servicio al concienciar a los internautas de los límites y peligros de esa estrategia y, a la vez, llama de los investigadores a una acción inmediata que impida la “googlarización de la realidad”. (Traducción: ALAI)

- Silvio Mieli es periodista y profesor de la Facultad de Comunicación y Filosofía de la Pontificia Universidad Católica (PUC-SP) de Sao Paulo.
Articulo original publicado en portugués por Brasil de Fato
http://www.brasildefato.com.br


http://alainet.org/active/24608